Directivos de la Cámara arrancaron 'estrenando' recusación
El representante Germán Navas Talero recusó al presidente Edgar Gómez Román, y el vicepresidente Santiago Castro, para advertir su impedimento frente a acciones con el referendo.
Los nuevos directivos de la Cámara de Representantes entraron estrenando recusación: el representante Germán Navas Talero lo hizo para advertir que el presidente, Edgar Gómez Román, y el vicepresidente Santiago Castro, están impedidos para realizar cualquier acción frente al referendo reeleccionista
Esta nueva querella es un nuevo obstáculo para la aprobación de la conciliación del referendo reeleccionista en el Congreso
Navas hizo entrega al propio Gómez Román de la solicitud de recusación por considerar que tanto él como el vicepresidente conservador estarían incursos en conflicto de intereses, por ser sujetos de una investigación penal ante la Corte Suprema de Justicia por el presunto delito de prevaricato al votar en segundo debate el mencionado proyecto
En su alegato Navas sostiene que el estar incursos en dicha investigación los inhabilita para reconformar la comisión de conciliación por parte de la Cámara, lo que además los hace susceptibles de procesos de pérdida de investidura por parte de cualquier ciudadano
Navas dijo que los congresistas ya están advertidos de la apertura de la investigación e incluso la corte ya hizo inspecciones judiciales tanto en la Cámara como en el senado
El congresista del Polo Democrático, quien además votó por Gómez Román para presidente de la Cámara, dijo que una cosa es lo político y otra lo jurídico
Navas fue el denunciante de los 86 congresistas que en la madrugada del pasado 17 de diciembre votaron el referendo reeleccionista, por presunto prevaricato. Entre los denunciados están Gómez y Castro
La recusación de Navas implica que los dos dignatarios de la Cámara no puede reconformar la comisión de 25 congresistas, la mayoría de los cuales ha renunciado a pertenecer a la misma
Implica además, que la queja debe ser trasladada a la comisión de Ética para que se pronuncie y en cualquier caso tendría que ser aprobada o negada por la plenaria, lo que significa que la conformación de los conciliadores del referendo reeleccionista tardará unas dos semanas adicionales.