Montoya gana por segundo año consecutivo y hace historia

El piloto colombiano Pablo Montoya le dio a su equipo de Chip Ganassi, al volante de un Lexus Riley, la ventaja para que su compañero Scott Pruett volviese a ganar la tradicional carrera de resistencia de las 24 Horas de Daytona.
Montoya, que ya había ocupado el primer lugar con el vehículo número 01 en varias etapas de la carrera dejó a su compañero, el estadounidense Pruett, para que completase la gran carrera y lograse el tercer triunfo consecutivo del equipo, una marca histórica.
Junto a Montoya y Spruett también formaron equipo, el británico Dario Franchitti y el mexicano Momo Rojas, que al igual que Montoya realizó un gran trabajo en las horas que estuvo al volante.
Salvo por un problema pequeño de Pruett, quien no podía controlar bien la dirección de su vehículo el sábado por la tarde, al comienzo de la competencia, el prototipo Lexus Riley, con el número 01, lució casi perfecto.
El coche de Chip Ganassi marchó en la punta o cerca de esta durante toda la carrera, que resultó sin embargo la más disputada en sus 46 años de historia, hasta las últimas horas
El triunfo del equipo fue el tercero consecutivo, algo que nunca se había dado en las 46 ediciones de la 24 horas de Daytona y supera los dos que habían logrado ellos mismos el año pasado y el de Holbert, en 1986 y 1987.
Al amanecer del domingo, cuando restaban unas seis horas de competencia, había cinco prototipos más en la vuelta de los punteros.
Pero como suele ocurrir en las carreras de resistencia, el desgaste le fue pasando la factura a varios pilotos y al final el equipo de Montoya y Rojas impuso su clase.
El bólido de Ganassi había intercambiado el primer lugar con el Ford Riley del equipo formado por los estadounidenses A.J. Allmendinger, Ian James, Burt Frisselle y John Pew.
El coche, conducido por Frisselle, estaba a unos segundos de los líderes cuando se le reventó un neumático, lo que provocó averías en la suspensión, poco después de que se cumplió la vigésima primera hora de la carrera de resistencia más importante en Estados Unidos.
Montoya, quien tomó el volante cerca de que concluyera la vigésimo octava hora, logró una ventaja cómoda de cinco vueltas en el circuito de 5,73 kilómetros y a partir de ese momento, su equipo se aseguró el triunfo.
Ganassi, el dueño de la escudería, al concluir la carrera comenzó a abrazar a los pilotos triunfadores, y gritó: "`Increíble! `Esto es asombroso!".
Mientras que luego un poco más tranquilo dijo que había sido de nuevo el triunfo de todo el equipo.
"Estoy muy contento por lo que hemos conseguido y por recibir el premio al gran esfuerzo realizado", destacó Ganassi.
Para Pruett, un piloto con gran experiencia, fue su tercera victoria en la competencia de Daytona, para Montoya fue la segunda y además consecutiva después que el año pasado hiciese su debut en la Nascar tras abandonar la Fórmula Uno.
"Es asombroso e increíble no sólo el triunfo sino el ver como a pesar de todo los problemas y la lluvia después de 24 horas hemos conseguido estar de nuevo en la delantera para acabar primeros", comentó Montoya. "Fue muy difícil hasta el final", dijo.
El piloto colombiano, nombrado el novato del año pasado en la NASCAR, reconoció que el auto número 6, pilotado Frisselle estuvo durísimo.
"Solo hasta que tuvo un problema no dejo de inquietar. Después, sólo nos enfocamos en llevar el auto a la meta", explicó Montoya.
Tanto Franchitti, quien ganó el título de la IndyCar el año pasado, como Rojas, compitieron en esta carrera por primera vez, que además fue la edición más reñida de su historia.
El año pasado Montoya, Pruett y el mexicano Salvador Durán lideraron 468 de 668 vueltas para ser también los grandes protagonistas.
Como sucedió el año pasado Montoya cedió el volante a Pruett para las últimas dos horas de la competencia, dándole la oportunidad de ser el piloto con más triunfos en Daytona, al lograr su tercera victoria en las 24 Horas y otras cinco más en otro tipo de carreras.
"Sólo seguiremos haciendo esto el tiempo que podamos", declaró Pruett, mientras intentaba recuperarse del esfuerzo.
El coche 01 de Ganassi superó por dos vueltas al Pontiac Riley conducido por Jimmie Johnson, bicampeón defensor de la NASCAR; Jimmy Vasser, ex campeón de la CART, y por los campeones de prototipos de la Serie Grand-Am en el 2007, Jon Fogarty y Alex Gurney.
En el tercer lugar, cuatro vueltas atrás, estuvo el Pontiac Riley, conducido por Kurt Busch, campeón de la NASCAR; el brasileño Helio Castroneves, ganador de las 500 Millas de Indianápolis, y Ryan Briscoe.
Durante la carrera, 15 bólidos distintos ocuparon el primer lugar, rompiendo el récord de 11, impuesto el año pasado. En total, hubo 60 cambios de líder, 16 más que el récord de 44, establecido en el 2005.