El difícil matrimonio de los de los Sarkozy

Los rumores sobre el divorcio del matrimonio Sarkozy se han disparado en los medios de comunicación franceses, en las últimas dos semanas, mientras el Eliseo guarda silencio.
El hecho de que la pareja no haya sido vista en público desde el pasado 14 de julio ha hecho que un cúmulo de informaciones hayan aparecido en los últimos meses.
El Diario L'Est Républicain (en cuyas páginas la esposa del presidente desveló los entresijos de la negociación con Libia para la liberación de las enfermeras húngaras), afirmó que el comunicado oficial se iba a anunciar el viernes, mientras que hoy, Le Nouvel Observateur asegura que dicho comunicado se producirá mañana lunes.
El Elíseo guarda silencio. "No tengo ningún comentario que hacer sobre este tipo de rumor de prensa", aseguraba ayer el portavoz del presidente, David Martinón a la agencia Reuters.
Los rumores no son nuevos. En 2005, la pareja atravesó una crisis matrimonial después de que el semanal Paris Match publicara una fotografía de Cecilia en actitud cariñosa con el presidente de una agencia de publicidad. Nicolas Sarkozy, entonces ministro del Interior, usó sus estrechas relaciones, y el redactor jefe de la publicación, Alain Genestar, fue fulminantemente despedido.
Nada más alcanzar la presidencia de la República Francesa, la prensa gala se hacía eco de nuevo de las influencias del flamante presidente para acallar los rumores sobre su relaciones conyugales en la prensa: Le Journal de Dimanche, por presiones del círculo cercano a Sarkozy, habría dejado de publicar la información de que Cecilia Sarkozy no acudió a votar en la segunda vuelta de las elecciones.
Las noticias sobre el posible divorcio se han visto alimentadas por el hecho de que desde el pasado 14 de julio, la fiesta nacional francesa, la pareja no haya sido vista junta en público. Los focos de las cámaras esperaban captar a los Sarkozy juntos cuando fueron invitados por la familia Bush a un almuerzo durante sus vacaciones en EE UU, pero Cecilia no asistió por culpa de unas "anginas blancas", según aseguró el propio presidente francés.
Además, el pasado mes de septiembre, Sarkozy era 'cazado' con una nota entre sus papeles, a la salida de una reunión en el Elíseo: "Tengo la impresión de no haberte visto desde hace una eternidad y te echo de menos. El jueves partimos a nuestra gira en Essaouira (?). Pero me gustaría poder verte la semana o el fin de semana siguiente. Millones de besitos (en castellano en el original)". El asunto quedó zanjado asegurando que la autora de la carta era la propia Cecilia, y que el destinatario era el propio presidente.
La prensa sitúa ahora a la esposa del presidente en Ginebra, Suiza, lejos del mandatario. Pero los desmentidos no oficiales también asoman por los rotativos galos: "No te preocupes. Toda va bien", es el SMS que supuestamente Cecilia Sarkozy escribió a su amiga Isabelle Balkany y que hoy recoge Le Parisien.
Si se confirma el divorcio entre la pareja, sería la primera vez en la historia de Francia que un presidente de la República en ejercicio se divorcia de su mujer.