Internacional

Alberto Fujimori: "ojalá me permitieran quedarme en Chile"

El ex presidente peruano Alberto Fujimori manifestó su deseo de vivir en Chile si el juicio de extradición que se sigue en su contra le es finalmente favorable. "Ojalá me permitieran quedarme en Chile", afirmó en una entrevista que publica hoy el diario El Mercurio el ex mandatario peruano, que el pasado jueves obtuvo la libertad provisional después de permanecer seis meses en detención preventiva.

El ex presidente peruano Alberto Fujimori manifestó su deseo de vivir en Chile si el juicio de extradición que se sigue en su contra le es finalmente favorable.
"Ojalá me permitieran quedarme en Chile", afirmó en una entrevista que publica hoy el diario El Mercurio el ex mandatario peruano, que el pasado jueves obtuvo la libertad provisional después de permanecer seis meses en detención preventiva.
"No sé si podré quedarme, a lo mejor tendría que buscar otro destino, pero ojalá me permitieran quedarme en Chile", insistió.
Fujimori, que se encuentra reunido con sus hijas Sachi y Keiko y el esposo de esta última en su residencia del elegante barrio de Las Condes, recalcó que desde su llegada Chile, el pasado noviembre, se ha sometido a la legislación chilena.
"Por eso tengo confianza de que podré quedarme aquí", subrayó.
La Corte Suprema chilena otorgó el pasado jueves la excarcelación al ex presidente peruano (1990-2000) previo pago de una fianza de 2.900 dólares, aunque lo dejó con orden de arraigo que le impide abandonar el país.
El ex mandatario reiteró además que nunca ha pensado en fugarse como han especulado autoridades peruanas y los abogados de la acusación en el juicio de extradición.
"Soy optimista, no me pongo en ese escenario, respetaré la decisión de los tribunales, aunque parto del principio de que no hay pruebas y no seré extraditado", subrayó Fujimori.
El ex presidente peruano, que residió en Japón desde que abandonó su país en el año 2000 en medio de un escándalo de corrupción, llegó por sorpresa a Chile el pasado 6 de noviembre y al día siguiente fue detenido, en virtud de una orden de captura con fines de extradición librada por Perú.
Fujimori sostuvo que pese a que existían ofertas de otros países como Panamá, Singapur y EEUU para refugiarse, eligió Chile porque estaba más cerca de Perú, aunque corría el riesgo de ser detenido, como finalmente sucedió.
Reconoció que en los seis meses que estuvo detenido en la Escuela de Gendarmería de Santiago (policía de prisiones), varias veces sus fuerzas flaquearon, "especialmente cuando terminaba el horario de visita a las cinco de la tarde".
"Sentía una gran desolación, pero el hecho de haberme dedicado a arreglar el jardín de la Escuela me sirvió de mucho, incluso pensé bautizarlo como 'Plaza Fujimori', pero no me atreví a pedir permiso a Gendarmería", sostuvo el ex presidente peruano.
Para este domingo, Fujimori tiene planeado celebrar el reencuentro familiar con un plato típico peruano: ají de gallina preparado por él mismo.
"La liberación amerita una pequeña celebración familiar, no como un triunfo, sino como un reencuentro", comentó Fujimori, que no ha parado de hacer declaraciones desde que el pasado jueves dejó su lugar de reclusión en Santiago.
Aunque el presidente advertió que no quiere involucrarse en temas políticos relacionados con Chile, Perú y Bolivia, igualmente criticó a su antiguo colaborador Vladimiro Montesinos.
"Me defraudó completamente, hasta el año 2000 no tenía indicios para desconfiar", subrayó.
Sostuvo que considera a Montesinos y su entorno culpable del derrumbe de su gobierno.
Fujimori, que es requerido por la justicia peruana por diez delitos de corrupción y dos de violaciones de los derechos humanos, reside desde el pasado jueves en una casa en el barrio de Las Condes, al oriente de Santiago, con máximas medidas de seguridad.

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