Política

Por primera vez habla Vicente Castaño, el jefe supremo de las autodefensas

José Vicente Castaño Gil, el poder detrás del trono de las AUC, aseguró que Carlos Castaño está vivo y dijo que no está dispuesto a someterse a un proceso de extradición. Propuso que los miembros de las AUC desmovilizados, se vinculen a las fuerzas de seguridad oficilaes o privadas, y reveló que las autodefensas tienen una alta influencia política en el Congreso y que sostienen relaciones directas con sus miembros.Castaño Gil, en su primera aparición en público, le concedió una entrevista a la Revista Semana, cuyos apartes más importantes fueron reproducidos en exclusiva por el programa Hoy por Hoy Fin de Semana de Caracol Radio. Dirigentes políticos afirman que las AUC buscan legalizar el paramilitarismo

José Vicente Castaño Gil, el poder detrás del trono de las AUC, aseguró que Carlos Castaño está vivo y dijo que no está dispuesto a someterse a un proceso de extradición. Propuso que los miembros de las AUC desmovilizados, se vinculen a las fuerzas de seguridad oficilaes o privadas, y reveló que las autodefensas tienen una alta influencia política en el Congreso y que sostienen relaciones directas con sus miembros.
Castaño Gil, en su primera aparición en público, le concedió una entrevista a la Revista Semana, cuyos apartes más importantes fueron reproducidos en exclusiva por el programa Hoy por Hoy Fin de Semana de Caracol Radio.
“José Vicente Castaño Gil jamás había hablado en público. La única imagen que se conocía de él era una vieja fotografía que tiene más de 30 años. Por años dejó que sus hermanos, Carlos y Fidel, fueran los protagonistas públicos de la historia reciente del paramilitarismo en Colombia”. Así comienza la crónica que es portada de la revista Semana.
La entrevista es una verdadera primicia periodística: conversación con el verdadero jefe de las autodefensas, el cerebro detrás de la acción paramilitar en todos los departamentos de Colombia, el único hombre al que obedecen todos los comandantes paramilitares y el responsable de limar las diferencias entre esos comandantes para que avance el proceso de diálogo con el gobierno.
Lo primero, el arranque de la entrevista es el interrogante de porqué Vicente Castaño se animó a hablar con la prensa por primera vez. Según dice, porque está “convencido que las armas sobran y para tratar de convencer a la gente que las armas hay que hablar”. Revela los comienzos de su actividad en las autodefensas, cuando, hace once años lo llamó su hermano Carlos Castaño justo después de la desaparición de Fidel. Era la época en que se encargaba de los negocios de familia. Terminó tomando las riendas de lo que eran en ese entonces las autodefensas: un grupo de no más de 40 hombres. Era una cosa casi de vecinos unidos para defenderse de la guerrilla. El primer vecino al que llamó fue Salvatore Mancuso.
Sobre el retiro de Carlos Castaño del liderazgo de las autodefensas, dice Vicente Castaño: “Fue una cosa que inicialmente nunca entendimos y él nunca lo explicó. Después con el tiempo ya nos dimos cuenta, y él mismo confesó, que renunció por algo estratégico, que era tratar de tomar distancia de la Corte Penal Internacional”.
La pregunta obligada: ¿Carlos Castaño está vivo o muerto? “Está desaparecido”, dice, “porque ninguno de nosotros lo ha visto muerto. Hasta que no aparezca o lo vea muerto no diré nada. Lo que si sé es que él mantenía buenas relaciones con algunos americanos. Lo del asilo político y de sus dos esposas es muy diciente. La primera esposa tiene asilo político y la segunda tiene carácter de refugiada en ese país”. Y no descarta una posible negociación de Carlos Castaño con los Estados Unidos.
Acerca del compromiso de desmovilización de las autodefensas para finales de 2005, Vicente Castaño dice a Semana: “Si hay seguridad legislativa se podrá cumplir con todas las desmovilizaciones. Si no tenemos seguridad y no sabemos con qué política llegará el nuevo Presidente será muy difícil convencer a toda la comandancia de las virtudes del proceso de paz. Habría que esperar el nuevo gobierno. Es muy difícil desmovilizarse y entregar las armas si existe la posibilidad de terminar en una cárcel de Estados Unidos. Cuando hablo de un blindaje jurídico incluyo la extradición”.
Y cuando se le recuerda que él, alias "Don Berna", ni alias "Macao", están solicitados en extradición, y que es posible que su anuncio de desmovilización no sea otra cosa que una manera de evitar la extradición, contesta: “Esas son especulaciones políticas ligadas a la coyuntura. Nosotros no entramos a las autodefensas por miedo a ser extraditados o miedo a terminar en una cárcel. Entramos a luchar por este país. Sin embargo qué sentido tiene entrar a un proceso de negociación si no tenemos las garantías de que no nos van a extraditar”. Asegura además que la palabra del Presidente es pública sobre el tema de la extradición pero no basta.
En el tema del poder político de las autodefensas, afirma que las autodefensas tienen más del 35 por ciento de amigos en el Congreso. Y para las próximas elecciones van a aumentar ese porcentaje.
Específicamente sobre Don Berna, dice que la decisión del presidente de capturarlo fue un poco apresurada pero que se llegó a una solución salomónica.
Dos detalles finales: El primero, su opinión sobre el Comisionado Luis Carlos Restrepo: ““Es un hombre muy inteligente, muy pragmático y muy sagaz. Lo malo es que es muy personalista. Todo lo quiere manejar él y al modo de él. Cuando llegó lo veíamos como un loco pero después uno no es capaz de vivir sin él. Eso pasa siempre con los siquiatras. Y, segundo, sobre si tienen muchos ex miembros de la fuerza Pública en las Autodefensas, a lo que contesta: “Los ex militares que tenemos en nuestras tropas son muy buenos en la parte administrativa pero malos para combatir. Algunos de estos soldados son buenos es en táctica de defensa, especialmente cuando hay que salir corriendo”.
Durante cerca de tres horas, el director de la revista Semana, Alejandro Santos, y el editor de Orden Público, Ricardo Calderón, conversaron, en una zona no del todo lejana a Santa Fe de Ralito, con Vicente Castaño Gil, el llamado verdadero jefe de las autodefensas.
Dirigentes políticos afirman que el objetivo de las autodefensas es legalizar el paramilitarismo
Así lo aseguraron los representantes a la Cámara Gustavo Petro y Luis Fernando Velasco al comentar las declaraciones de Vicente Castaño a la Revista Semana sobre la intención de aumentar la presencia de sus amigos en el Congreso.
Para el dirigente del Polo democrático, las declaraciones de Castaño confirman que en el Congreso de la República hay presencia paramilitar . "Lo que es más grave harían parte de un Senado en el que las leyes las harían los narcotraficantes".
El representante del Cauca, Luis Fernando Velásco, señaló que el objetivo del grupo armado es pasar de un 35 a un 100 por ciento en su representatividad parlamentaria, con el apoyo del gobierno nacional a través de una ley como la de justicia y paz.
Agregó que estaría de acuerdo con que ellos paguen la cárcel en granjas agrícolas pero con el compromiso de no meterse en el Congreso.
Para el senador Carlos Moreno de Caro , la entrevista de Vicente Castaño permite conocer muchas verdades que el país necesita conocer "y en ese sentido se puede ver que el proceso de paz va bien porque ellos se desmovilizarán a finales de este año", indicó.
Se mostró de acuerdo con la posibilidad de que ellos sean llevados a granas agrícolas para purgar sus penas que van de tres a cinco años, porque eso garantiza quitarles poder a los violentos.

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