Fernando Vallejo: 'Colombia es un país asesino, oportunista y traidor'
En exclusiva para el programa Seis AM Hoy por Hoy Fin de Semana, el escritor habló desde México a propósito de la publicación de su nuevo libro, "Manualito de imposturología física". En la obra, arremete contra Darwin, Einstein y Newton, y se propone demostrar de manera científica que sus descubrimientos no son más que imposturas, mentiras
En exclusiva para el programa Seis AM Hoy por Hoy Fin de Semana, el escritor habló desde México a propósito de la publicación de su nuevo libro, "Manualito de imposturología física". En la obra, arremete contra Darwin, Einstein y Newton, y se propone demostrar de manera científica que sus descubrimientos no son más que imposturas, mentiras.Vallejo propone una nueva unidad de medida para la mentira, el "aquino", pero dijo que a los políticos colombianos era imposible medirlos en "aquinos", y que a ellos "hay que medirlos en 'uribes', la unidad de la bellaquería política y de la demagogia tartufa."Navarro, Mockus, Peñalosa, Gómez Méndez... esa gente mide 0.3 'uribes', 0.4 'uribes'... ninguno llega a la unidad. Pastrana se mide en 'uribes' completos... Carlos Gaviria es un leguleyo de los que estamos hasta el gorro".Fue especialmente duro con el ex presidente César Gaviria, a quien calificó como un personaje siniestro que, con la apertura, "le dio el puntillazo final al país". Reconoció que solo ha Gaviria le ha llamado en sus escritos marica. "Me he referido a él como una mariquita manzanilla. Es un hombre degradado moral. El único político colombiano desinteresado que he conocido es Navarro Ospina, que estuvo al frente del Partido Conservador durante 50 años".Vallejo marcó una diferencia fundamental entre él y los ecologistas: "Quiero a los animales por ellos, por lo que son, mientras los ecologistas los quieren por lo que le puedan servir al hombre". Aseguró, además, que los animales son su prójimo, porque "todo el que tenga un sistema nervioso para sufrir y sentir es nuestro prójimo. La diferencia entre un hombre, un perro y una rata es muy poca".A propósito del tema, se refirió a la directora de Bienestra Familiar, Beatriz Londoño: "Es una infamia que esta señora esté ahí. El acto que hizo ella durante la alcaldía de Mockus, con los 400 perros que electrocutó en Engativá, es una de las cosas más monstruosas que ha tenido Colombia. Tan monstruosa como los genocidios de la época de la violencia".A la iglesia la responsabilizó de muchos de los problemas de la humanidad, y no perdió oportunidad de recordar las profundas diferencias que mantiene con el Vaticano. "El Papa es una alimaña. El mal que le ha hecho a la tierra es inconmesurable. Es el responsable de gran parte de la explosión demográfica", y lo acusó de comportarse como un político manipulador.Cuando se le preguntó si leía la obra de Santiago Gamboa, Antonio García, Efraín Medina, Sergio Álvarez y los demás escritores colombianos de la nueva generación dijo: "Desde que empecé a escribir no volví a leer literatura. Me dejó de interesar. Sólo leo libros de biología y física. No me interesan estos jóvenes escritores, son menores que yo y no tienen nada que revelarme".Vallejo comentó que no tiene proyecto alguno de escribir un libro sobre las imposturas de los personajes del orden nacional porque "no dan para un libro", y porque a ellos hay que, según él, denunciarlos a través de las columnas de opinión que mantiene en la revista SoHo. "Es la única revista libre de Colombia, libre de temor. La mayoría de los medios de comunicación colombianos están acobardados". Sostuvo que la radio y la televisión temen que un cierre y que la prensa escrita tiene intereses en el gobierno. "Tuvimos dos importantes periódicos, El Tiempo y El Espectador. De eso no queda rastro". Internet, donde navega únicamente para leer los comentarios que se hacen de sus columnas, es para Vallejo "un inmenso basurero, un gigantesco recicladero de basura". Declaró a Colombia el "país de la impunidad", pero manifestó que nunca se ha ido del país: "físicamente nunca me he ido; espiritualmente estoy aquí. Cada día tengo menos amigos en Colombia, porque es un país oportunista y traidor. Siempre pensé que iba a morir en Colombia, y lo sigo creyendo. Tengo claro que si vuelvo a Colombia voy a morir asesinado. Colombia es un país asesino".