La ovinocultura, sello de identidad en Marulanda, Caldas

Manizales

Marco Tulio Henao Trujillo es el gerente de la Cooperativa Ovina de Marulanda, fundada en 1.937, hace ya 82 años, por 29 socios, quienes aportaron, cada uno, cinco centavos y una oveja.

Actualmente la empresa cuenta con más de 900 hectáreas de terreno, un parque industrial y 2.500 animales de los cuales se obtiene la lana para la fabricación de cobijas, ruanas, almohadas y ponchos, entre otros, que son compra casi obligada para los visitantes de la zona, lo que le convierte en una de las principales fuentes de empleo del municipio y las localidades vecinas, gracias al esfuerzo y gestión de la junta directiva que ha logrado el apoyo de la gobernación de Caldas para superar varias crisis económicas y mantener el legado.

La administración departamental a través la Secretaría de Desarrollo Económico ha dado un impulso muy importante para el montaje de la tienda artesanal en las instalaciones de la Cooperativa, y el proyecto de repotenciar su maquinaria que tiene 121 años de funcionamiento, ya que comprar una nueva costaría cerca de 1.250 millones de pesos.

Aunque esta aún tiene un buen desempeño requiere un proceso para modernizarla y así lograr de nuevo hilos de calidad como el tipo paño que alcanzaron hace algunos años, de tal manera que se pueda competir con los hilos sintéticos que son los que se encuentran de manera masiva en el mercado.

Otro eje de apoyo lo brinda la Secretaría de Agricultura de Caldas, con la que realizan un trabajo de modificación genética de los ejemplares para mejorar su calidad. En este momento se dispone de las razas Suffolk, Romney Marsh y Moro Colombiana que se caracterizan por su rusticidad y su lana de fibra larga.

Señala el gerente de la Cooperativa que actualmente se está incursionando en el sector turístico con la oferta de paquetes para conocer el proceso de producción de la lana, pescar y disfrutar los increíbles paisajes del norte caldense, aprendiendo por ejemplo cómo se lleva a cabo la esquila que se hace cada 8 o 10 meses desde el nacimiento de los animales hasta los 8 años de edad, lo cual favorece su desarrollo corporal.

"Son muchas las cosas que la gente llega a conocer de nuestra empresa, como por ejemplo que una oveja puede ser productiva en lo que se refiere a lana de buena calidad hasta los 8 años, pero que es fundamental suministrarle una buena alimentación con sales y minerales además de controles veterinarios continuos y de desparasitación", afirma el señor Henao Trujillo.

La Cooperativa Ovina de Marulanda tiene una labor netamente social por lo que el lavado de la lana por ejemplo es hecho por madres cabeza de hogar, antes de ser llevada a la zona industrial para estirarla y obtener los hilos. Además sus 116 socios no obtienen ningún beneficio económico ya que el objetivo principal es seguir con la tradición familiar, aunque sí deben hacer un aporte de 16 salarios mínimos legales vigentes, en el momento de hacer su solicitud de ingreso.