La ola detenida y la temible realidad venezolana

Magdalena Yaracuy y Juan Carlos Méndez Guédez, además de ser venezolanos, comparten varios episodios en sus vidas: salieron de su país en busca de un mejor porvenir, estudiaron en la misma universidad y añoran su tierra como todo emigrante.

Magdalena es la protagonista de la novela policiaca “La Ola Detenida” del escritor Juan Carlos Méndez, en la que esta mujer, con mucho de detective y una pizca de bruja, es contactada en España, donde reside, para que regrese a Venezuela en búsqueda de Begoña, la hija de un prestigioso político ibérico, de la que se desconoce su suerte

La Caracas a la que llega Magdalena, tras muchos años de ausencia, es desconocida para mal, encuentra una ciudad con problemas en cada esquina y una desazón que la detective no recuerda haber visto, ni en los peores momentos mientras vivió en la capital venezolana.

En 316 paginas, Méndez Guédez lleva a los lectores por detalles que nos reflejan una Caracas en donde el secuestro se ha convertido en toda industria, militares armados en lugares que ni en la más sórdida imaginación se habrían visto, una ciudad en donde los terribles asesinatos se convirtieron en un hecho cotidiano sin espacio para el duelo social.

La constante nostalgia de la Caracas que recuerda, se apodera de Magdalena haciéndole perder, momentáneamente, de la misión por la que se dio su retorno a Venezuela.

María Lionza, la beldad femenina a la que acuden los venezolanos sedientos de ser reconfortados espiritualmente, pareciera ser el elixir de Magdalena para seguir adelante y por intermedio de la santa buscar caminos hacia el paradero de su objetivo.

“La Ola Detenida” aparece en Colombia bajo el sello de HarpeCollins y la distribución de Ediciones Urano.