La instalación del tubo equivocado le costó a Santander $9.000 millones
La represa de La Batanera colapsó en 2016 por la instalación equivocada de un tubo y había tenido una inversión de $9.000 millones.
Luego de varios estudios técnicos para determinar las causas del colapso de la batanera, la empresa de Servicios Públicos de Santander, ESANT, junto con la Sociedad Santandereana de Ingenieros, determinaron que el mal diseño y la utilización de materiales no adecuados fueron las principales causas del colapso de esta represa que le costó al departamento más de 9.300 millones de pesos.
"Ese tubo debía ser clase cuatro pero se utilizó clase 1 y después tomaron la decisión de un ponerle un tubo metálico por dentro y usarlo como desagüe de loso y este no estaba adecuado para trabajar bajo presión y se rompió", aseguró Juan Carlos Carvajal, director de Proyectos de la ESANT.
La ESANT, buscará que el contratista V.A.S.C.O encargado de la construcción de esta obra, pague el 70% del valor total, mientras que la póliza de seguro deberá cancela el 30% restante.