Sanciones por cobrar más de un millón y medio de pesos a grupo de turistas

Cartagena de Indias

La Asociación de Vendedores del Módulo 11, en las playas de Bocagrande, suspenderá a la vendedora que el pasado domingo intentó cobrar más de un millón y medio de pesos a unos turistas extranjeros.

Gracias a la denuncia que hizo un portal de noticias de Cartagena, la Alcaldía de Cartagena, a través de la Secretaría del Interior y Convivencia Ciudadana, y la Policía Metropolitana de Cartagena ubicaron a los turistas afectados y conocieron de primera mano cómo ocurrieron los hechos en los que un prestador de servicios turísticos les cobró una cantidad exagerada de dinero.

Para ello, funcionarios de la Secretaría del Interior y de la Policía dialogaron con la persona denunciada, y posteriormente lo hicieron con los turistas para contrastar las versiones entregadas por las partes.

El caso, según explicaron los turistas (noruegos, rusos y venezolanos), ocurrió el domingo anterior, en el sector de playas frente al hotel Capilla del Mar. Unos operadores de servicios turísticos que laboran en el módulo número 11, les cobraron más de un millón y medio de pesos por la compra de varios productos durante su estadía en el lugar, tal como reza en una factura que les entregaron.

Un funcionario de la Secretaría del Interior y Convivencia Ciudadana señaló que después de conversar con las partes (prestadora de servicios y turistas), se elaboró un acta de compromiso en el que la prestadora del servicio acepta que cobró de más y se compromete a no volver a violar lo establecido en el Decreto 006 de 2016, mediante el cual se fijan los precios en las playas de Cartagena.

Además, se conoció que este miércoles la asociación a la que pertenece la prestadora del servicio turístico sostendrá una asamblea, a la que fue invitada la Secretaría del Interior, en donde se oficializará la suspensión de esta persona. En dicha reunión se establecerá por cuanto tiempo regirá la medida.

Siete días cerrado

Por otra parte, la Policía en Playa Blanca, en Barú, cerró por siete días el restaurante de razón social Saltona, cuyos responsables, el domingo anterior, cobraron de más por un servicio de alimentos a unos turistas.

Se indicó que se elevó la queja a la Policía y los responsables debieron comparecer ante las autoridades. Durante el procedimiento, se hizo la devolución de 400 mil pesos, producto de los servicios prestados.