300 emberas retornan a Risaralda y Chocó
Los indígenas permanecieron en Medellín por seis años, sometidos a los peligros de la indigencia y el consumo de sustancias psicoactivas.
61 familias embera retornaron a Pueblo Rico y al Chocó luego de permanecer durante 6 años en Medellín, sometidos a los peligros de la indigencia y el consumo de sustancias psicoactivas.
El municipio de Pueblo Rico fue testigo del reencuentro de 190 adultos y 110 niños emberas con sus familiares y amigos, tras haber sido desplazados por el conflicto armado hacia Medellín.
Varios de ellos pertenecen al resguardo Gitó Dokabú, los demás continuaron su travesía hasta el Alto Andágueda, en Bagadó, Chocó. Habla la alcaldesa de ese municipio, Marinela Palomeque.
8 buses fueron necesarios para el traslado de los indígenas desde Antioquia hasta Risaralda, donde recibieron ayudas humanitarias por parte de la Unidad para las Víctimas y dinero en efectivo para su manutención durante estos primeros días del regreso.