Esteban Ospino, el hombre que enfrentó con su flauta al diablo en Carreto, Atlántico

Al estilo de Francisco el Hombre, quien rezó el Credo al revés y entonó la melodía más hermosa y armoniosa jamás escuchada. Ante tal despliegue de habilidad, Satanás escapó entre las penumbras dejando como ganador del duelo a Francisco.

En el municipio de Candelaria, Atlántico, cuentan la leyenda de Esteban Ospino, un flautista experimentado que se enfrentó con el diablo cuando se dirigía a su parcela en el corregimiento de Carreto. Así lo recuerda Cloris Machacón, habitante de la población.

“Esteban Ospino, era de Campo de la Cruz, y en su momento por el tema del río se daban grandes inundaciones y la gente de allá buscaban lugares altos para llegar, y Carreto era un lugar alto, Esteban llegó con su familia y se quedó viviendo allí. Dicen los ancestros que Esteban llevaba su flauta para todos lados. Un día salió para su parcela y se encontró con un hombre el cual le empezó a pedir su flauta, pero no le decía su flauta, sino dame tu aparto. Esteban se apercibió y se dio cuenta que quería robarle su alma, él le toca el Ave María en su flauta y de inmediato despareció aquel hombre extraño”, dice Machacón.

Esteban se convirtió en una leyenda, de esas leyendas que solo suceden en ese macondo de García Márquez. Es llevado en cada proceso cultural, y se ha tomado como ejemplo para seguir fortaleciendo las formaciones con los jóvenes.

Los gestores culturales han querido visibilizar la historia de Esteban, para que las nuevas generaciones conozcan de esta leyenda, que vive en la memoria de los mayores y que a través de las generaciones se ha mantenido.