En este Tiempo de sequía en Antioquia no queda ni una flor para mascar

Producción de flores, frutas, legumbres ha sufrido el impacto, y las fuentes hídricas siguen bajando el nivel.

Aunque por estos días cientos de familias se alistan para recibir la época de las mejores ventas de cada año, por la temporada de San Valentín en los Estados Unidos, los floricultores del municipio de La Ceja se declaran muy perjudicados por los efectos del fenómeno de El Niño, con una intensa sequía como en el resto del país.

Caracol Radio visitó los cultivos de flores en el oriente antioqueño, la mayoría de los cuales se encuentran en territorio municipal de la Ceja, donde pudo observar que por esta época los campesinos no han podido producir flores de alta demanda como el crisantemo y las hortensias, que se requieren para exportar.

En la vereda San Gerardo, del Corregimiento San José, de La Ceja, oriente de Antioquia, doña Cecilia Gutiérrez, cultivadora de flores y, además, presidenta de Asoflocs, aseguró el calor tiene muy perjudicado su trabajo porque las altas temperatura han caudado una sensible reducción en las fuentes hídricas, mismas que surten e irrigan esta zona del departamento y hoy están casi secas.

“En estos momentos llevamos mes y medio que no ha caído una gota de agua, como es bien sabido en esta zona todos producimos flor, en poquita o grande escala, algunos con 5 mil matas, otros con 50 mil matas o cien mil matas. Pero la economía de todos es la flor, nos ha afectado porque carecemos de agua y no tenemos los riegos suficientes para darle a estos cultivos”, lamentó la señora Gutiérrez a través de Caracol Radio.

Y lo lamentó con una razón adicional: Antioquia es la zona donde más se cultivan hortensias en el mundo, y precisamente esta apetecida flor está muy escasas debido a la sequía en la región, una temperatura que quema los pétalos y los deja inútiles.-

“La hortensia, como se sabe es hidrangea, su nombre científico; es decir que viene de agua. La hortensia tiene que estar hidratada, pero como carece del líquido, la flor no crece y queda pequeña, el sol la afecta y cuando abre no queda blanca sino azul, a las hojas le da el golpe de sol y quedan amarillas. Ahora las comercializadoras están exigiendo mucha calidad”, describió la presidenta deAsoflocs, Cecilia Gutiérrez.

Ni una flor para mascar

Pero estos no son los únicos problemas. El intenso calor hace que proliferan los hongos y las plagas que afectan los cultivos, y con ello también crecen los costos de producción y hasta las pérdidas económicas del negocio.

“Lo que pasa es que nos piden flores de copa grande, tallo derecho y follaje perfecto. Eso es mucho porque ahora no sale perfecto el cultivo y tenemos muchas pérdidas. Por otro lado, se alborotan las plagas, el ácaro y áfido. Nos toca estar fumigando dos veces a la semana sin riego, y además, el cambio de temperaturas heladas y el cambio brusco a sol, se propagan hongos como ceniza, botritis y estenfilium. Mejor dicho, las pérdidas en la flor han sido grandes”, confirmó la líder de los floricultores en esa franja antioqueña.

En medio de esta situación, los cultivadores también viven una gran paradoja: el país vive una devaluación del peso, el incremento en el precio del dólar -por encima de los 3 mil 400 pesos- lo cual beneficia a los empresarios exportadores para sus despachos internacionales y para tener buenos ingresos, pero no tienen flores para vender, la producción es mínima o de baja calidad, y, por ello, no pueden recuperar su economía.

“A muchos sí se nos dañó el negocio, porque si no tiene buen riego afecta un 50 o 60 por ciento la producción. Si a la mata no le llega el agua que necesita (yo) no puedo sacar buena producción. Con el dólar a 3 mil, o puede estar a cinco mil pesos, pero si primero vendía 5 mil y ahora vendo mil, no me beneficio del precio del dólar, eso es una paradoja”, se entristeció doña Cecilia Gutiérrez.

En el caso de las comercializadoras de flores en La Ceja, los empresarios aseguran que se observa la disminución de producción de tallos, y que han disminuido un 60 por ciento del pico que se había establecido para esta temporada del año y de demanda internacional.

“En estos momentos la flor grande Premium está escasa por el verano y sequía; estamos cortos en esa producción, está en un 60 por ciento disminuida la de flor hortensia, muy disminuida por falta de agua. En esta época, en pleno pico enviábamos 400 cajas diarias; en estos momentos están mermadas, de aquí están saliendo 80 cajas, y casi que al mes logramos 250 cajas y eso es por la sequía”, reveló a Caracol Radio Víctor Arias, comercializador de flores en ese municipio antioqueño.

Los floricultores antioqueños tenían sus esperanzas puestas en los ingresos que conseguirían con sus despachos por el día de San Valentín en varios lugares del mundo, especialmente hacia los Estados Unidos, pero son estas condiciones de clima, y un fenómeno de El Niño cada vez más duro, puede decirse que no tienen, como la vieja canción de Pablus Gallinazus en los años 60, una flor para mascar.

Agricultura paisa afectada en 70% por el intenso calor

Rubiela Valencia Ocampo, de la vereda Fátima, describió sin rodeos la situación dramática que viven los cultivadores de alimentos en el oriente: “estamos muy afectados porque aquí tenemos agua de yacimientos y ya el agua es poquitica, lo que reguemos en la mañana y ya, porque lo que no se alcanza a regar se secó ya”.

El panorama es cada vez más desolador en el campo y para los bolsillos de las familias campesinas dedicadas a la producción de legumbres, frutas, hortalizas, flores, y arañarle al campo esos productos que llevan a los mercados y de ahí a la mesa.

“Se han perdido los cultivos completos de mora, lulo y frijol, además la papa está amarilla, todo se va a perder, estamos afectados un 70 por ciento, mucho. Por aquí el empleo no es mucho porque, además, hortensia no hay y no hay trabajo, algunos le dan trabajo en la hortensia, pero en verano no dan trabajo, porque no salen cultivos”, sentenció la señora Valencia, en diálogo con Caracol Radio.

Luz Elena López Castro también confiesa que ya no saben qué hacer. Los yacimientos de agua son insuficientes para atender las necesidades de la ciudadanía y de sus cultivos, y admite que deben priorizar el gasto de agua en el consumo humano.

“Se presentan muchos calores y muchas heladas, todos los productos se queman porque en la mañana es frío y en la tarde un calor horrible. De lo que uno siembra se está perdiendo la mitad, la economía esta regular, más bien mala. Nosotros tenemos un nacimiento de agua que va para seis familias y está disminuido del todo. No se puede hacer riego, toda la legumbre orgánica, especialmente la mora se ha afectado por eso”, describió la señora López Castro mientras enseña lo que queda de sus cultivos en deterioro.

Doña Luz Elena no pierde la fe en que las condiciones mejorarán, que el clima volverá a ser el que siempre les ha permitido dedicarse a lo que ha sido su trabajo desde siempre en el campo, allá en las veredas de La Ceja, oriente paisa, y sobre todo que les quite el peso de esta preocupación:

“Antes esperábamos que se acabara el mes de enero y se normalizara todo, porque si febrero va a ser más caluroso, ahí si me preocupa porque ni siquiera vamos a poder hacer un solo riego. Una semanita de invierno, una semana de verano ya se secó todo, nos vemos perjudicados, hay que tasar para la casa lo poco que hay y lo otro hay que dejarlo así a la voluntad de Dios”.

Bajos niveles en fuentes hídricas

La administración del municipio de La Ceja también lanzó su alerta sobre las actuales condiciones de las fuentes hídricas y la contribución que deben hacer todos los ciudadanos para la conservación de estos recursos naturales.

El director agroambiental de este municipio del oriente de Antioquia, Alejandro Echeverri, confirmó que en estos momentos no tienen niveles críticos de disminución de los caudales de las fuentes hídricas, pero sí empieza a preocupar el panorama que se avecina por el fenómeno de El Niño, especialmente cuando los propios expertos advierten que esa sequía se endurecerá en los primeros días de febrero y se prolongará.

“En estos momento el panorama ya se va tornado preocupante, porque se están produciendo algunas disminuciones en los cauces de algunas quebradas que surten acueductos”, reconoció el señor Echeverri a través de Caracol Radio, al advertir que todos los sectores productivos en esa parte de Antioquia se están afectando por el verano intenso.

“Normalmente en estas épocas de sequía, por ejemplo, en el cultivo de la hortensia los tallos se hacen más pequeños, las flores se hacen más pequeñas y en otros cultivos se presentan también el incremento de plagas”, detalló el funcionario municipal.

Y añadió que las condiciones de otros sembradíos también es preocupante: “los cultivos de pompón que utilizan agua para su riego se ven perjudicados porque el reporte es que ha habido mermas en los reservorios de agua que tienen los cultivos y ello ha llevado que los técnicos de estas productoras de flores comiencen a hacer planes de contingencia”.

La administración municipal de La Ceja emprendió una asistencia agrícola, para acompañar a los empresarios en los cultivos de flores y otros productos, para que, además, se haga un uso eficiente del agua y mitigar los efectos de la sequía sobre aquellos cultivos que puedan mantener posibilidad de salvarse en este Tiempo de sequía, como diría el novelista de la tierra antioqueña Manuel Mejía Vallejo.