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La dura travesía del indígena colombiano que duró preso 23 meses en México por llevar yagé

Claudino Pérez, taita de la comunidad amazónica Uitoto-Murui y Experto en medicina ancestral, habló sobre el Estuvo preso en México durante 23 meses por llevar yagé a ese país

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Claudino Pérez, taita de la comunidad amazónica Uitoto Murui / Caracol Radio.

El taita Claudino Pérez Torres, de la etnia indígena Uitoto-Murui, experto en medicina ancestral que se dedica a realizar ceremonias de sanación, limpieza con yagé y bebidas ancestrales, estuvo preso durante casi dos años (23 meses) en México. Lo curioso del caso es que en su pasaporte tenía 38 entradas a ese país en los últimos 5 años, sin presentar novedad alguna. Sin embargo, un buen día, en medio de la requisa natural, encontraron que en el contenido de las botellas albergaba un estupefaciente y no hubo forma de explicarle a los oficiales que todo era para un ritual.

¿Qué pasó?

En 10AM Hoy por Hoy de Caracol Radio, el taita Claudino Pérez, contó que tras pasar el escáner de llegadas internacionales, se pasa un filtro y ahí identifican que lleva unos líquidos en el fondo de su maleta. Se trataba de cuatro botellas con yagé para realizar unas limpiezas en ese país, que claramente incluyen esencias de plantas aromáticas.

“Yo iba invitado por una organización por una organización internacional de los pueblos del mundo con motivo del equinoccio de primavera, que era el 21 de marzo de 2022 y la primera ceremonia sería en Querétano”, comentó.

¿Cómo termina en la cárcel?

Según contó Pérez, él siempre viajaba a México con tres o cuatro botellas de Siempre viaja con tres o cuatro botellas de ayahuasca o yagé. No tuvo inconvenientes con el primer filtro, vino la inspección canina y todo se mostró con normalidad. Sin embargo, relató que al cambiar el filtro del escáner de llegadas internacionales, al fondo vieron unas botellas que mostraban un tomo café amarillento, y las autoridades de ese país manifestaron que era droga.

“Ellos llaman a la Marina y llevaron al laboratorio una de las botellas, y a las tres horas, me informaron que la bebida supuestamente contenía DMT (N,N-dimetiltriptamina) un alcaloide triptamínico de núcleo indólico presente en numerosas plantas y seres vivos.

“El dimetil es una droga sintética que se fabrica en laboratorio, y que según las autoridades mexicanas es una droga muy fuerte que está en el primer grupo de la ley general de salud pública. Sin embargo, este hace parte de las hierbas y es un producto natural. Para muchos se trata de un alucinógeno, para nosotros es la visión, existen diferencias en ese sentido”, afirmó.

Proceso Judicial

Entre tanto, Pérez relató que fue llevado al Ministerio Público, que queda en el Aeropuerto Internacional Benito Juárez, de la Ciudad de México, y tuvo muchos inconvenientes. Empezando por su defensa, ya que tuvo que acudir a amistades para que le recomendaran un buen abogado, sumado a la falta de respuesta del Consulado de Colombia en México.

“Yo estaba detenido y la resolución del caso la daría un juez de la República. Después de dos días, determinaron mi situación jurídica y en la primera audiencia el apoderado nunca llegó. Hubo falencias en la argumentación y parecía que tampoco conocía las leyes de la salud pública de México. El juez terminó parando la audiencia para que se documentaran mejor”, afirmó.

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